¿Qué instalaciones podemos ofrecerle?
Autoconsumo
Una instalación de autoconsumo es aquella en la que se utiliza la energía producida por la instalación solar para alimentar directamente los dispositivos conectados a la misma. No dispone de sistema de acumulación, lo que reduce significativamente su coste. La energía sobrante, que no es utilizada, puede ser vertida a la red eléctrica para conseguir un plus de eficiencia, una vez legalizada la instalación.
Autoconsumo con acumulación
La instalación de autoconsumo con acumulación es un sistema que combina la generación de energía solar a partir de los paneles fotovoltaicos, con la capacidad de almacenar el exceso de energía generada en baterías. Este tipo de sistema permite aprovechar al máximo la energía solar al almacenar el excedente durante los períodos de alta radiación solar y utilizarlo cuando la radiación es baja o durante la noche.
Instalación aislada
Esta instalación es la que no está conectad a la red eléctrica convencional. Este tipo de sistema se utiliza en áreas donde no hay posibilidad de conexión a la red eléctrica o es demasiado costosa. La energía generada excedente, se almacena en baterías para su uso posterior cuando hay radiación solar. Se recomienda la instalación de un generador secundario para evitar posibles pérdidas de red.
Elementos principales de la instalación
Paneles
Son dispositivos compuestos por células fotoeléctricas, comúnmente llamadas “celdas solares” que convierten la luz solar en electricidad mediante el efecto fotoeléctrico. Los paneles solares son los componentes más visibles de una instalación. Pueden instalarse en techos, estructuras elevadas (como pérgolas) o sobre el terreno, con una estructura adecuada.
Inversor
Gestionan la conversión de la energía generada por los paneles solares de corriente continua (DC) a corriente alterna (AC) utilizada en la mayoría de los dispositivos eléctricos. También controlan el flujo de energía entre los paneles solares, las baterías y los consumidores.
Baterías
En algunas instalaciones, se incluyen baterías para almacenar el exceso de energía generado durante el día para su uso durante la noche o en momentos de baja producción solar. Esto permite una mayor independencia de la red eléctrica.